Un comunicado de la Red Europea contra la comercialización y privatización de la salud y la protección social (http://europe-health-network.net/), People’s Health Movement Europe (https://phmovement.org/), European Public Service Union (EPSU https://www.epsu.org/), Alter Summit (www.altersummit.eu), Medact
16 March 2020
Asegurar una sanidad pública significa asegurarnos de que las personas más vulnerables también puedan acceder a todas las medidas de salud que se tomen. La distribución desigual de los recursos compromete nuestra capacidad para controlar el virus y nos lleva a sufrir y morir innecesariamente hoy y mañana.
Esta crisis es solo la punta del iceberg. Durante varios años, los sistemas de salud de los estados miembros europeos han sufrido fuertes ataques de privatización, comercialización, déficit de financiación y regionalización, impuestos por la Unión Europea a través de medidas de austeridad en el gasto en salud. Esto ha afectado la capacidad de los sistemas sanitarios para coordinar campañas de prevención a gran escala y ha limitado su capacidad de expandir los servicios de atención en situaciones de crisis, al mismo tiempo que erosiona la confianza de la población general en todo sistema de salud.
Por estos motivos la Red Europea, *People’s Health Movement, EPSU*, Alter Summit and Medact instan a nuestros responsables políticos locales, nacionales, europeos y mundiales a emprender acciones inmediatas para proteger nuestra salud pública.
La crisis que estamos presenciando hoy ilustra por qué luchamos cada 7 de abril, el Día Europeo de Acción contra la Comercialización de la Salud y la Protección Social y el Día de la Salud de las Personas: un sistema de salud fuerte, solidario y accesible para todos y todas. ¡Ahora, más que nunca, llamamos a la movilización inmediata de recursos!
Hoy, el 7 de abril y después; ya sea en la calle, en nuestros hospitales, a través de las redes sociales o en la prensa, instamos a las personas encargadas de la toma de decisiones a garantizar que nuestro sistema de salud y nuestros profesionales de la salud sean capaces de responder a las necesidades de la población a través de un fuerte sistema de salud público y universal que esté protegido de las lógicas lucrativas y el apetito de las empresas comerciales.
Incluso antes de esta crisis sanitaria, los servicios públicos, no mercantilizados, ya no podían satisfacer las necesidades de la población debido a la falta de recursos. Lo que hace que actores con intereses comerciales se introduzcan en el "mercado" para llenar el vacío creado por esta política. Estos servicios comerciales ofrecen servicios más caros a a aquellas personas que sean capaces de pagar más por ellos. Esto significa que la ciudadanía más rica pueden pagar una atención rápida, regular y de calidad. Otros tienen que conformarse con la atención que los servicios públicos y no de mercado, con fondos insuficientes, aún pueden ofrecer.
Lo que necesitamos es atención médica rápida, gratuita y de calidad accesible a todas las personas. En su ausencia, la tasa de mortalidad causada por este virus, COVID-19, continuará aumentando dramáticamente.
A medio y largo plazo, el aumento del gasto público en salud y el aumento de la inversión en salud pública, no comercializada, es crucial, no sólo para revertir años de gasto insuficiente en muchos países, sino también para garantizar que el personal y las instalaciones de salud puedan hacer frente a las demandas futuras. Incluso antes del brote de COVID-19, Europa tenía un déficit de alrededor de un millón de profesionales de la salud.
El 6 de marzo, en el Diálogo Social de Hospitales de la Comisión Europea en Bruselas, los sindicatos destacaron su preocupación por la salud de los profesionales de la salud y la falta de protocolos y materiales de seguridad. Las empresas comerciales privadas se están aprovechando de la escasez durante este brote y están vendiendo material sanitario de seguridad básica, al mejor postor, al tiempo que generan temor en la población.
La Organización Mundial de la Salud exige medidas de control estrictas, incluido el seguimiento y el aislamiento de las personas que han estado en contacto con pacientes. Si en varios países no se pudo seguir esta recomendación lo suficientemente rápido, es debido principalmente a la falta de personal y recursos en el sector sanitario, y además a los intereses económicos nacionales a corto plazo. Como consecuencia, las personas de Europa han contribuido a propagar el virus a países, como el continente africano, que tienen sistemas sanitarios más frágiles debido a la inadecuada vigilancia y baja capacidad de los laboratorios, la escasez de recursos humanos en salud pública y los medios financieros limitados.
En todas partes, los profesionales de las instituciones sanitarias están mucho más expuestos que el público en general y corren un riesgo particular al continuar en primera línea de este brote. En Italia, el 5% de los casos diagnosticados por COVID-19 son en profesionales de la salud. Como profesionales sanitarios de primera línea, su posición es vulnerable para empezar, y se agrava por las consecuencias de la avalancha de medidas de austeridad y recortes presupuestarios que los sistemas de salud pública en Europa han sufrido durante la última década.
En muchos casos, por ejemplo en Italia, las limitaciones al empleo que se implementaron para reducir los gastos han llevado a tener déficit de profesionales de la salud en el sistema público. En respuesta a esta escasez, algunos países han tenido que recurrir a contratar a profesionales de la salud que ya se habían jubilado. Esto no solo demuestra la falta de preparación de nuestros sistemas sanitarios para responder a las necesidades de las personas, sino que también pone en riesgo la salud de estos profesionales de salud jubilados. En otros países, como Bélgica, la escasez de equipos de protección básicos es motivo de gran preocupación: si se produce dicha escasez en los países centrales de la UE, debería ser aterrador imaginar hasta qué punto podrían crecer en los países de la periferia donde los sistemas de salud pública son aún más precarios.
Es crucial para nosotros reconocer el papel extremadamente importante que desempeñan los profesionales de la salud para abordar este brote de la enfermedad por coronavirus y apoyarlos a ellos y a sus sindicatos en sus solicitudes de tener una proporción de personal segura y la provisión de equipos de protección adecuados.
- Porque los servicios saludables y de calidad comienzan con fondos suficientes ...
- Porque una población solo puede ser saludable si las fuerzas del mercado se ven frustradas...
- Porque el acceso a la salud significa garantizar la accesibilidad financiera, geográfica, temporal y cultural para todos y todas ...
- Porque la democracia en salud es esencial ...
- Porque el 75% de nuestra salud depende de las condiciones sociales, ambientales y de género en las que vivimos ...
- Porque la política de medicamentos debe estar al servicio de la población y no al servicio de las compañías farmacéuticas transnacionales ...
- Porque nuestra salud, nuestras personas cuidadoras, nuestros hospitales están en peligro ...
LUCHEMOS TODAS LAS PERSONAS JUNTAS POR UN FUERTE SISTEMA DE SALUD PÚBLICO E UNIVERSAL CAPAZ DE TRATAR LAS CRISIS DE SALUD DE HOY Y MAÑANA
El 7 de abril, por quinto año consecutivo, organizamos acciones descentralizadas en toda Europa para el Día Europeo de Acción contra la Comercialización de la Salud y el Día de la Salud de las Personas en todo el mundo.
Hemos decidido cancelar todas las reuniones y acciones presenciales. Hacemos un llamamiento a toda la ciudadanía para que muestren su apoyo a "difundir la solidaridad, no el virus" con una acción en “una hoja en blanco”, el 7 de abril:
1. Escribe tu mensaje en una hoja en blanco y cuélgala en un lugar visible
2. Hazle fotos
3. Comparte tus fotos en las redes sociales con el hashtag # health4all
Finalmente, damos nuestra más sincera gratitud a los profesionales de la salud que están dedicando sus vidas a ayudar a las personas afectadas y enviamos nuestras condolencias a los amigos y familiares de las personas fallecidas.
La Red Europea contra la comercialización y privatización de la salud y la protección social - europe-health-network.net
People’s Health Movement Europe - phmovement.org
European Public Service Union (EPSU), epsu.org
Alter Summit - www.altersummit.eu
Medact
Contacto: Sarah Melsens, Coordinadora de la Red Europea contra la comercialización y privatización de la salud y la protección social, P. +32499 42 44 48 - europeanhealthnetwork@gmail.com